viernes, 28 de marzo de 2014

¿Coaligarse? Solo si no hay más remedio - J.Luis Trasobares

El Independiente ( El Periódico de Aragón - 28/03/2014 )

Ya lo saben: por fin, CHA irá a las europeas con Equo y Compromís. Supongo que en IU, donde han tenido bastantes líos internos al confeccionar su candidatura, se habrán quedado hasta más tranquilos. Hubo inicialmente cierta confusión sobre la oferta que los de Cayo Lara hacían a la formación aragonesista, que si el puesto décimo, que si el octavo... por lo visto iba a ser este último, en el bien entendido de que debía ser ocupado por un candidato que representara a toda la izquierda unitaria de la Tierra Noble, no específicamente a Chunta. Así que en este partido se echaron para atrás. Estos barullos unioneros no les gustan. A ellos, que la izquierda sea tan variopinta, tan grupuscular y tan poco eficiente en términos electorales les parece casi bien. ¿Por qué considerar la división un problema, cuando se trata más bien de una virtud?
Por supuesto, CHA va a salir perdiendo en esta jugada. Las expectativas de Equo y Compromís no son tan estupendas. Ninguna de las nuevas marcas minoritarias (Podemos, Equo y otros a la izquierda; Vox, a la derecha) parece haber calado. La merma que sufran los mayoritarios, PP y PSOE, pasará (más o menos a IU y UPD) sin provocar mayores conmociones. La oportunidad que ofrece en las europeas el colegio electoral único (el que mejor recompensa el voto) agudizará la imperfección del bipartidismo español, pero no provocará vuelco alguno. Y aun relativizando la repercusión de esta cita con las urnas (cosa que no deberíamos hacer), nadie duda de que el test de mayo proyectará su resultado sobre las autonómicas y municipales y las generales del 2015.
En el PSOE aspiran a que las europeas certifiquen que el péndulo de la alternancia está de vuelta (él solito, que los actuales jefes socialistas pasan de empujarlo). Siendo así, la lucha por la secretaría general podría ponerse hasta interesante. En el PP, a la espera de que Rajoy extienda su divino dedo, lo apuestan todo a que la gente se resigne a tener trabajos eventuales y mal pagados considerándolos un privilegio (¡ya está resuelta la crisis!). ¿Y el PAR, qué? Bueno... el PAR bastante tiene con lo suyo.

jueves, 27 de marzo de 2014

No queremos, no podemos - Juan Manuel Aragüés

No queremos, no podemos ( El Periódico de Aragón - 27/03/2014 )

Finalmente, se han confirmado los peores pronósticos y, en las elecciones europeas, quienes buscamos una opción contra el neoliberalismo y la troika deberemos elegir, al menos, entre cuatro candidaturas. Nada menos. Mientras desde La Razón se califica de terroristas a los integrantes de las marchas por la dignidad, mientras el gobierno sigue dando vueltas de tuerca para expoliar a la sociedad, mientras los corruptos siguen campando a sus anchas, quienes tienen la obligación de, desde un frente común, oponerse a la barbarie, continúan con su ceremonia de la confusión. Simplemente desesperante.
La aparición de Podemos en el campo político tuvo de positivo que puso encima de la mesa la necesidad de acelerar el proceso de alianzas dentro de la izquierda real, planteando un modelo participativo e ilusionante. Hubo un momento en que pareció que podía ser una vía para romper las inercias instaladas en el ámbito político. Sin embargo, su tardía aparición y su vocación electoral le han impedido, desde mi punto de vista, convertirse en catalizador de un proceso unitario.
En Aragón, la situación todavía es peor, pues no solo no se ha avanzado en procesos unitarios, sino que se ha retrocedido. Si en las pasadas generales se fraguó la alianza entre CHA, IU y la Iniciativa Social que se denominó La Izquierda de Aragón, de cara a las europeas CHA e IU irán cada una por su lado. No solo eso sino que en la reunión de CHA en la que se debía decidir si acudían con IU y la Iniciativa Social o en otra lista, la posibilidad de repetir la alianza de La Izquierda de Aragón no mereció un solo apoyo. Descorazonador, en el más estricto sentido del término, al menos así lo siento yo, que me emperré en la alianza CHA-IU. Y si esto se produce en las europeas, ¿qué pasará en las municipales y autonómicas? Esta es una pregunta que lleva camino de convertirse en retórica.

ALGUNOS se empeñan, aferrados a fraseología y analítica muy del gusto de la izquierda, en hablar de que no se dan todavía las condiciones de un proceso unitario, que la situación no está madura. Añaden que no es en un proceso electoral donde deben darse las alianzas, sino en la movilización. A mi modo de ver, palabras vacías. Vacías porque en la movilización siempre estamos juntos y porque hace ya mucho tiempo que tenemos un programa de mínimos en el que coincidimos. El problema es muy otro y muy antiguo: los intereses de grupo de los actores políticos constituidos. Mientras la acción política no esté sustentada en un verdadero deseo de transformar la realidad, más allá incluso de lo que pueda convenir puntualmente a una u otra organización, no avanzaremos en los procesos de confluencia. Mientras no nos demos cuenta de que las organizaciones son herramientas y no fines, no iremos a ninguna parte. Es decir que si no podemos no es porque no podamos, es porque no queremos.
Hay que cerrar ya esta etapa. Las elecciones europeas, aunque nos puedan dar alguna satisfacción, no serán la plataforma que algunos deseábamos para, como decía Pablo Iglesias cuando estuvo en Zaragoza, meterle miedo a los de arriba. Los de arriba nos seguirán mirando desde arriba y respirarán aliviados de ver nuestra incapacidad. Había que mandarles un mensaje: nos tenéis enfrente. No hemos sido capaces.
En nuestros círculos, no sé si por cautela, se decía que las europeas no importaban demasiado, que el verdadero horizonte son las municipales y autonómicas. Bueno, pues habrá que fijar ese horizonte, aunque a mí, en Aragón, se me antoja más complicado. Espero que según se vayan acercando, no comencemos a decir que lo importante son las generales. No sé si somos conscientes de que nos queda poco tiempo. Si la izquierda real no es capaz de alcanzar un potente protagonismo en breve plazo, si las posiciones neoliberales vuelven a encontrarse con las manos libres para desarrollar sus políticas, se consolidarán todas las agresiones cometidas en esta legislatura. Y la deriva fascista de nuestras sociedades se profundizará. Pero, ¿serán galgos o podencos?

Profesor de Filosofía. Universidad de Zaragoza

¿Tendrán que tragarse los valencianos un gobierno del PSOE pudiendo tener mayoría una unión de IU+Compromís?

Resultados de la encuesta de la Cadena Ser sobre elecciones en la Comunidad Valenciana
 
 
Los porcentajes de voto son :
 
PP: 29,7 %
PSOE: 21,2 %
Compromís: 15 %
UPD: 13,3 %
EUPV: 12,2 %
 
Si Compromís y EUPV unieran sus fuerzas, el 27,2% que les da esta encuesta aun podría crecer más. En cambio, si van por separado, a última hora perderán muchos votos que irán al saco del denominado "voto útil".
 
Este ejemplo nos tiene que hacer reflexionar a todos: ¿No vamos a ser capaces de unirnos? ¿Vamos a conformarnos con un papel testimonial pudiendo ser mayoritarios?


lunes, 24 de marzo de 2014

¿HEMOS PERDIDO EL TREN DE LA UNIDAD DE LA IZQUIERDA?

Se acercan las elecciones europeas y todo parece indicar que van a existir varias candidaturas que competirán por el voto "indignado". Si nadie pone remedio, IU, "Podemos", y Equo-Chunta Aragonesista van a concurrir por separado

Los grupos de ciudadanos que luchamos por una confluencia electoral -y junto a CIUDADAN@S POR LA UNIDAD DE LA IZQUIERDA de Teruel tenemos que mencionar destacadamente a grupos como Ateneo de Zaragoza y C+3 de Huesca- no hemos perdido la esperanza de que la unidad se consiga y vamos a seguir presionando a las fuerzas políticas para conseguir, básicamente, dos objetivos: 1.-Que los partidos situados a la izquierda del PSOE confluyan en una única candidatura electoral. 2.-Que asimismo esos partidos arbitren mecanismos imaginativos para que en la elaboración de programas y en la confección de candidaturas puedan participar personas que no están afiliados a ningún partido político. En resumen, que se produzca una auténtica confluencia social, una confluencia de los ciudadanos.

Lo que pedimos es que, entre todos, podamos crear ilusión. Y la realidad es que no detectamos, por parte de las direcciones de esos partidos, mucho entusiasmo para conseguir la confluencia. En los últimos días hemos asistido a diversas modalidades del deporte político de "echar balones fuera". Todos los partidos tienen muy claro lo que tienen que hacer los demás para conseguir la unión. Pero el esfuerzo propio no aparece por ningún lado.

No valen los escapismos a los cuales estamos ya acostumbrados. No valen argumentos como el de "lo importante es confluir en la calle y no en las cúpulas". No vale perderse en debates cuasilingüísticos sobre si lo importante es la unión o la unidad. No vale refugiarse en la autocomplacencia de lo bien que han funcionado cada uno los partidos por separado. Ni tampoco en las relativamente buenas perspectivas que dibujan las encuestas.

La unidad -o unión o como queramos llamarle- de la izquierda no es una opción más: es la única posibilidad de pararle los pies a la derecha depredadora y trabucaire. Si las candidaturas de izquierda van separadas, la ilusión de los ciudadanos se disipará y el voto se dispersará, se perderá en restos electorales, irá a parar al capazo del "voto útil", o a la abstención y al voto nulo y blanco.

Lo que los partidos de la izquierda tenían que haber hecho hace ya mucho tiempo es sentarse para poner las bases de un "programa de mínimos", un programa que podría centrarse en 1) Medidas para la regeneración y la dignificación de la vida política. 2) Medidas para posibilitar que los ciudadanos puedan participar más directamente en la vida política del país, y controlar a sus representantes. 3) Medidas para una nueva política fiscal, económica, social y laboral.

Manifestación Marchas de la Dignidad 22M  Madrid  Foto: Jorge Tabuenca
Llegar a estos consensos no les tendría que resultar tan difícil a los dirigentes de los partidos, dado que llevan años pidiendo a sus afiliados y a los ciudadanos que se movilicen una y otra vez para defenderlos en la calle. ¿Es mucho pedir que nos sentemos todos para hablar de lo que nos une y no de lo que nos separa? Nadie tiene que tener miedo a una posible absorción: llegar a acuerdos no supone perder la personalidad propia de cada organización. ¿Es que tienen miedo de contaminarse de las ideas de los demás?


Alguien dijo que el capitalismo es un tigre de papel. Pero ese tigre muerde. Muerde y come mucho. Algunos en el campo de la izquierda política, para luchar contra ese tigre, se resignan a dar de comer a 4 ó 5 gatitos juguetones...

martes, 18 de marzo de 2014

Estos no se enteran de nada... - José Luis Trasobares

El Independiente ( El Periódico de Aragón - 18/03/2014 )

Jose Luis Trasobares

Es difícil hallar una explicación al despendole autodestructivo que anima a los partidos políticos. A casi todos. Al PP, que retrasa la publicación de su lista a las próximas europeas mientras Rajoy se piensa con su habitual parsimonia a quien bendecirá con su dedazo. Al PSOE, cuya candidata estrella a las citadas elecciones, Elena Valenciano, se arrastra por los platós (el domingo por la noche, en El Objetivo de la Sexta) maldesgranando un argumentario manido, simplista, sin fondo, sin forma... sin nada. Patético. A Izquierda Unida, que en Madrid y otros lugares se está abriendo por las costuras después de que la cúpula, radicalmente contraria a la celebración de primarias, dejase en la cuneta a los sectores que no están en la onda de Cayo Lara, que es la onda del PCE. A Chunta Aragonesista, cuyo presidente, José Luis Soro, publicó el domingo en este diario un extraño artículo diferenciando entre la unidad y la unión de la izquierda que ha dejado a muchos estupefactos. Todo lo cual ocurría mientras profesionales de la política iban y venían por los juzgados (aquí mismo, en Zaragoza, el tráfico fue intensísimo) y la desafección ciudadana alcanzaba su cénit. Esta gente no se entera o no quiere enterarse o probablemente pasa de todo. Vamos, que les importa un huevo.
El sistema ha sido socavado desde dentro. La respuesta de lo que solemos llamar clase política a la poliédrica crisis que nos azota choca con la evidencia de que, si partidos e instituciones siguen sumidos en el descrédito, la democracia va a convertirse en un sombrajo con los palos carcomidos y azotado por el viento. Es probable que en el PP apuesten por agravar aún más la situación, en la creencia de que el pánico de la ciudadanía, su suelo electoral, la fidelidad de sus votantes y la creación de una realidad percibida (a base de propaganda subliminal y mentiras rampantes) acabarán por salvarles de la quema. La derecha española siempre ha sido antipolítica. Cuando todo está en manos del jefe (ese Mariano que dice quién sí y quien no), los espacios de gestión colectiva, diálogo o debate sobran
(Continuará) 

domingo, 16 de marzo de 2014

¿UNIDAD O UNIÓN ? DE LA IZQUIERDA -

Alberto Granados


Hoy aparece un importante artículo de José Luis Soro, presidente de Chunta Aragonesista, sobre el tema de la unidad/unión de la izquierda:

El artículo trata sobre la unidad/unión de la izquierda porque el autor contrapone ambos términos. Me queda la duda de si he entendido bien sus tesis: Según José Luis Soro, reclamar la unidad de la izquierda "es tanto como pretender acabar con ella", porque la unidad de la izquierda consiste en una unidad orgánica, una especie de "monopolio de la izquierda" que anularía la pluralidad.

Por tanto, rechaza la unidad de la izquierda pero, en cambio, es partidario de otra cosa que dice que es distinta, que es la "unión" de la izquierda.

Se me hace un poco cuesta arriba que alguien piense que colectivos como CIUDADAN@S POR LA UNIDAD DE LA IZQUIERDA han nacido para acabar con la izquierda. Se ve que si nos llamáramos CUIZ, CIUDADAN@S POR LA UNIÓN DE LA IZQUIERDA entraríamos en el campo de la corrección política.

Esta disyuntiva unión/unidad no tendría por qué ser ningún problema, porque los que estamos presionando a los partidos de izquierda para que confluyan no estamos solicitando que se disuelvan, que abandonen sus ideas, que creen un bloque monolítico... No estamos tratando de acabar con la izquierda ni con los partidos que forman parte de ella: Lo que les estamos pidiendo es que organicen una unión electoral, que confluyan, y que den cabida a la participación de quienes no están adscritos a ninguna formación política. Si José Luis Soro, en vez de llamarle "unidad" como decimos nosotros, le quiere llamar "unión", pues le llamaremos unión. Ojalá ese fuera el único problema.

Pero sucede que José Luis Soro no solo no nos cuenta en qué consiste esa unión de la izquierda, sino que lo único que nos dice es que no es imprescindible que se produzca una coalición electoral.

Ahí es donde llega nuestra discrepancia: Si no hay coalición electoral lo "único" que pasará es que la derecha depredadora, la que pone a España y a Aragón y a sus ciudadanos de rodillas ante la Troika, tendrá por delante otros cuatro años. 

La unión o unidad de la izquierda no es una posibilidad más: Es la única alternativa que nos puede permitir cambiar las cosas. Si no se produce esa confluencia electoral, los esfuerzos de todos los militantes y simpatizantes de los partidos -CHA incluida- no habrán servido de nada. Ni tampoco se rentabilizará políticamente todo el trabajo de las mareas, los ciudadanos, los colectivos de todo tipo... Le habremos pedido a la gente un esfuerzo movilizador y luego los partidos no se habrán esforzado para unirse. Cuatro años confluyendo en la calle y luego no ser capaces de unirnos para unas elecciones.

Si la izquierda no confluye el voto se dispersará entre varias opciones, será absorbido por el denominado "voto útil", o se disgregará en la abstención o el voto nulo y blanco. No me puedo creer que CHA se resigne a otros cuatro años de esta situación...

Tenemos que agradecer a CHA todos los esfuerzos que ha realizado en estos años para que la voz de la izquierda haya llegado a todas partes. Y este agradecimiento no es un formalismo, es de corazón. Pero también tenemos que decirles, a CHA y a los demás partidos, que ha llegado de la hora de unir fuerzas y de dejar de echar balones a la grada.

Alguien dijo que el capitalismo es un tigre de papel. Pero ese tigre muerde, y mucho. Algunos en el campo de la izquierda política, para luchar contra ese tigre, se resignan a dar de comer a 4 ó 5 gatitos juguetones...

miércoles, 12 de marzo de 2014

IU y CHA buscan romper su tensión para ir juntos a las europeas

IU y CHA buscan romper su tensión para ir juntos a las europeas ( El Periódico de Aragón - 12/03/2014 )

El secretario de organización de Izquierda Unida federal, Miguel Reneses, se reunirá hoy en Zaragoza con varios representantes de Chunta Aragonesista (CHA), y también de la Iniciativa Social, para avanzar en el posible acuerdo para presentar una candidatura única a las próximas elecciones europeas de mayo.
Su objetivo será desbloquear la tensa situación que existe entre CHA e IU después de que esta última formación decidiera reservar el octavo puesto de la lista de las europeas a la Izquierda de Aragón sin que ambos partidos hubiesen hablado previamente lo que enfadó a Chunta. Desde entonces no ha habido apenas contactos ni acercamientos.
Los nacionalistas sí han hablado, en cambio, con Compromís y Equo. Esta es la otra opción que tiene CHA para las próximas elecciones europeas. Fuentes del partido aseguraron ayer que no hay ninguna decisión tomada, y que en cualquier caso, todas las posibilidades se estudiarán el próximo 22 de marzo en el comité nacional.
Además, sigue estando sobre la mesa la opción de no concurrir a los comicios, como sugieren algunos sectores de Chunta.


miércoles, 5 de marzo de 2014

COMUNICADO POR LA CONFLUENCIA

Comunicado de CUIZ (Ciudadan@s por la Unidad de la Izquierda) ante los últimos movimientos -fallidos- de cara a una confluencia de los grupos de izquierda en la elecciones europeas


1.-La unidad de los grupos políticos de izquierda no es una opción, sino una necesidad absoluta y una obligación moral. Si se hace, los resultados electorales y políticos pueden ser buenos o regulares. Si no se hace, todo saldrá mal, porque muchos votos serán absorbidos por otros partidos o se desperdiciarán en la abstención, el voto nulo, el voto en blanco, el denominado “voto útil” a otros partidos...

2.-El camino se recorre si existe voluntad de hablar de lo que nos une, no de lo que nos separa. Encontramos esa voluntad en muchos militantes de los partidos, la echamos de menos en la actuación de dichos partidos.

3.-Tiene más sentido buscar un programa común "de mínimos" que ponerse todos por separado a confeccionar cada uno un programa político. Ese programa de mínimos podría ir centrado en 3 puntos: 1.-Medidas de regeneración y dignificación de la vida política. 2.-Medidas que acerquen a los ciudadan@s a la toma de decisiones (nuevo sistema electoral, ley de referéndum más fácil, etc.) 3.-Nueva política fiscal, económica, social y laboral. Todas las organizaciones de izquierdas están luchando por estos puntos, cada una con sus matices y sus aristas, y no tendría que costar nada poner nuestras ideas en común. En todo caso, lo urgente es comenzar ese proceso reuniéndose para buscar los puntos comunes.

4.-Una vez establecido ese programa de mínimos, se podría elaborar un censo abierto para organizar una convención de programa y dotar a ese programa de más contenido.

5.-En nuestra visión, ese censo también serviría para la elaboración de listas electorales primarias. Comprendemos las reticencias de las organizaciones y la dificultad que entraña un proceso de ese tipo. Pero las organizaciones políticas no le pueden pedir a los ciudadan@s que estén todo el día movilizándose y, luego, no hacer ellos el esfuerzo de confluir. Y los partidos políticos tienen que dejar de tirar balones fuera y de argumentar que un proceso de primarias es muy complicado cuando, con primarias o sin ellas, ni siquiera han dado los primeros pasos para una confluencia.

6.-Podemos entender que para las elecciones europeas los partidos no se pongan de acuerdo, pero si no hay voluntad de unirse para las elecciones generales, autonómicas y municipales, intentaremos que los ciudadan@s les presionen por todas partes.


7.-En cambio, si sí que se produce esa confluencia, desde CUIZ nos comprometemos a convertirnos en agentes electorales de esa coalición y a presionar y convencer a los ciudadan@s para que se impliquen en las listas, para que participen y para que el día de las elecciones no falte ni un voto.



lunes, 3 de marzo de 2014

En IU han preferido no correr riesgos - José Luis Trasobares

El Independiente ( El Periódico de Aragón - 04/03/2014 )

Era de esperar. La dirección de IU ha preferido no correr riesgos ni complicarse la vida. Ya lo explicó Adolfo Barrena en este mismo diario: las primarias no pasan de ser un alarde publicitario y lo importante es el programa. Así que la coalición ha preparado una candidatura sin sorpresas para las europeas encabezada por el incombustible Willy Meyer, con el agregado de una joven, Marina Albiol, algún otro personaje significado (Javier Couso, el hermano del cámara de Tele 5 asesinado por los norteamericanos en Bagdad) y representantes de la catalana ICV o la gallega Anova (los de Beiras). A CHA le ofrecieron un puesto límite, el décimo de la lista, y parece que al final no irá. Podemos, tampoco. La selección se hizo con mucho tira y afloja pero bajo un incontestable control orgánico. La candidatura mayoritaria obtuvo un respaldo del 77%.

Es comprensible que los cuadros oficiales de IU no quieran primarias ni aventuras de ningún tipo. Pero no creo que, abierto ese melón, el problema radicase en los debates de naturaleza programática. Hoy, las izquierdas más consecuentes muestran una evidente identidad táctica porque todas preconizan la resistencia ante la ofensiva ultraliberal de la potentísima derecha y el desvío de una socialdemocracia vacilante (salvo viejas glorias como el portugués Soares, cuyos planteamientos programáticos, por cierto, valdrían igualmente para soportar cualquier candidatura cabalmente progresista). Unas primarias abiertas comportan otro riesgo, el de que las cosas, al final, no cuadren; o sea, que el control por la mayoría del aparato se resquebraje. Ese es el quid de la cuestión. Al final, las cosas son bastante simples. Las expectativas de IU son buenas, posee la más reconocida marca electoral... ¿por qué habría de meterse en barullos participativos y dar cancha a recién llegados que no están (exactamente) en su onda?

Ahora, IU tendrá que jugársela en las urnas compitiendo con otras alternativas que le van a disputar el mismo nicho. ¿Y si tales alternativas (incluida Chunta Aragonesista) se ponen de acuerdo, abren el compás y entran en liza con una sola candidatura?